
En este vídeo puedes ver una de las tareas más habituales en nuestro día a día, la unión de piezas de acero, mediante soldadura.
No hay misterio, pero sí hay mucha responsabilidad.
De una buena soldadura depende que una estructura sea segura, que una pieza encaje a la perfección o que un proyecto llegue al cliente exactamente como debe.
Nuestros compañeros trabajan cada unión, controlando temperatura, distancia y movimiento para asegurar un cordón limpio y resistente.
Es un proceso que parece simple cuando lo ves… pero que exige experiencia y mucha atención al detalle.
En Sanla, cada soldadura suma y forma parte del resultado final.



