Precisión, concentración, técnica…

El trabajo de plegado parece sencillo hasta que….

lo ves de cerca.

Cada pliegue tiene su truco.
No hay plantillas mágicas ni botones automáticos.
Solo práctica, experiencia y mucha atención al detalle.

👍 Cuando ves trabajar a nuestros compañeros en la plegadora, entiendes lo que significa tener oficio.

🔝 Saben cómo colocar la pieza, cómo leer el metal,
🔝 cómo anticiparse a lo que va a pasar antes incluso de que ocurra.

✔️ Aquí no hay margen de error, si el ángulo se pasa un milímetro, la pieza no encaja.

✔️ Por eso cada movimiento es medido, cada ajuste revisado, cada pliegue comprobado.

La máquina obedece, pero es la experiencia quien manda.

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